RENATO CARTESIUS
"Cogito ergo sum " pienso luego existo, puedo dudar de todo,
pero no dudar que estoy dudando" Sartre dice ¨ Existo luego pienso, los
muchachos del barrio; " existo más vale no pienso. Da para elegir.
Rene Descartes propone ir más
allá de la duda para alcanzar la certeza y someterla a ella misma a la duda,
revestir a todo con un carácter
provisional con la
"razón" como aliada
incondicional.
Las reglas:
1.-Evidencia: No aceptar como verdadero lo que con ¨toda evidencia¨ no se reconociese como a mi espíritu de manera
tan clara y distinta, que acerca de su certeza no pudiese caber la menor duda. Las otras tres
reglas son más rigurosamente metodológicas en búsqueda de la ¨verdad¨ en la ciencia.
El llama ¨claro¨ al conocimiento que es presente y manifiesto a un espíritu
atento, ¨distinto¨ al
conocimiento que es preciso y diferente
de otros. Lo distinto siempre es claro. ¨Siempre que defino algo, es claro y distinto, no así la percepción
que puede ser clara sin ser distinta.
2.-El
"análisis; dividir cada una de las
dificultades como sea necesaria para resolverlas.
3.- Síntesis ;ordenar
los conocimientos; desde los más sencillos, subiendo
a los más compuestos,
4.-La
"enumeración"; completas y generales,
con la seguridad de no haber omitido
algo.
Descartes nos brindó una imagen totalizadora y fragmentada al mismo tiempo
de la realidad, tal como lo evidencia su metáfora icónica del árbol del
conocimiento cuyas raíces son la metafísica, el tronco la física y las ramas
las ciencias particulares, la razón como elemento de crecimiento. La posición
que le asignara a la física pareciera ratificar la expresión que siglos después
vertiera Rutherford "la ciencia es física lo demás es filatelia".
El cartesianismo continúa brindando el sustento
filosófico-epistemológico a una manera de concebir al universo y la ciencia,
que favorece la especialización y la ultra especialización en detrimento de una
visión más general e integradora.
Esto ha repercutido innegablemente en muchas
actividades, en medicina en el " modelo biomédico" pero existe la
convicción de un cambio hacia una formación más general, nombres tales como,
¨modelo antropológico¨, ¨ecológico,¨ ¨biosiquicosocial¨, etc.
El error de Descartes
Desde hace décadas todos parecen tener algo
que decir contra Descartes. Sin embargo, las neurociencias tienen un ¨tinte¨
cartesiano ineludible. Cuando uno lee el ¨Discurso del Método¨ parece haber
encontrado el ¨camino¨ apropiado, pero el dualismo si bien es útil, nos puede
llevar a olvidar que somos una unidad.
Phineas Cage
Comentario
acerca P. Cage después del accidente: ¿Es posible concebir la mente como un ente independiente del cuerpo? La
historia de Phineas Gage y los hallazgos de la neurociencia moderna sugieren
que no.
Phineas Gage era un capataz de ferrocarril del siglo XIX, era un hombre
inteligente, sociable y respetado por su juicio sólido. Sus compañeros lo
recordaban como equilibrado, confiable y eficiente en su trabajo. Todo eso
cambió el 13 de septiembre de 1848.
Mientras
preparaba la construcción de una vía férrea en Vermont, una explosión
accidental lanzó una barra de hierro que atravesó su cráneo, dañando gran parte
del lóbulo frontal izquierdo. Gage sobrevivió milagrosamente, pero su
personalidad quedó marcada de manera irreversible. La inteligencia “pura”
permaneció intacta, pero su juicio moral y su estabilidad emocional se
desmoronaron.
Trabajó
luego en circos y conduciendo diligencias en Chile, pero nunca recuperó su
antigua vida. Murió a los 36 años, probablemente debido a complicaciones
neurológicas secundarias a su lesión, dejando un legado
científico y filosófico imborrable. Su historia evidencia que pensar
no es un acto aislado de la mente, sino un fenómeno
corporal, emocional y social.
Testigos de
la época comentaron:
“Tenía ante mis ojos al ser humano más frío, menos emocional y más
inteligente que uno pueda imaginarse; sin embargo, su razón práctica estaba tan
deteriorada que producía una sucesión de errores en la vida cotidiana. Solo
había un complemento significativo a su fracaso: una notable alteración de la
capacidad de experimentar sentimientos.”
Este accidente reveló algo crucial:
Las emociones y los
sentimientos no son
en absoluto intrusos en el bastión de la razón: pueden hallarse enmallados en
sus redes, para lo peor y también para lo mejor
Siglos después, Antonio
Damasio retomó este caso para reflexionar sobre Descartes. Según Damasio, el
error del filósofo francés fue imaginar la mente como separada del cuerpo. Para
Descartes, la mente era intangible, indivisible y asimétrica; el cuerpo, material,
medible y mecánicamente divisible. Esto llevó a creer que el juicio moral, la
reflexión profunda o incluso el sufrimiento podían existir independientemente
del organismo biológico.
Damasio demostró que nuestras operaciones
mentales más complejas dependen de razón y emoción entrelazadas en una
unidad biológica inseparable. La “razón pura” sin cuerpo es, simplemente,
un espejismo. Le dedica un libro a Descartes, donde expresa que el ¨Error de
Descartes¨ fue:
…la
separación abismal entre el cuerpo y la mente,
entre el material que está hecho el cuerpo, medible ,dimensionado
,operado mecánicamente infinitamente divisible, por un lado y la esencia de la
mente que no se puede medir, no tiene dimensiones ,es asimétrica ,no divisible
,la sugerencia que el razonamiento ,y el juicio moral ,y el sufrimiento que
proviene del dolor físico o la conmoción emocional pueden existir separados del
cuerpo. Más específicamente que las operaciones más refinadas de la mente están
separadas de la estructura y funcionamiento de un organismo biológico...
La
irracionalidad con reglas es esa zona
gris inseparable donde las emociones, permiten que no todos sea racional ni
totalmente irracional, estudiada ¨racionalmente¨ por Daniel Kahneman (Nobel de
economía) y Amos Tverski, que descubrieron las deficiencias que tenemos en
situaciones de incertidumbre, que son muy frecuentes y cómo actuamos en situaciones de incertidumbre donde nuestra
irracionalidad sigue patrones predecibles, denominados heurísticas. Son atajos
mentales que nos permiten tomar decisiones rápidas cuando disponemos de
información parcial, incluso si eso nos conduce a errores sistemáticos.
Lejos de ser defectos, estas
heurísticas reflejan la racionalidad de nuestra irracionalidad: reglas
evolutivas que nos ayudan a sobrevivir y a actuar en un mundo complejo.
Reconocerlas y utilizarlas nos da herramientas poderosas para mejorar nuestras
decisiones.
Lo cual confirma que; ¡hasta para ser irracionales
nos ajustamos a reglas!, las encontraron y las denominaron heurísticas, formas
de pensamiento rápido, atajos cuando tenemos datos parciales o incluso que
tomamos muchas veces aun cuando disponemos de datos adicionales que posibilitarían
decisiones más racionales.
Son útiles, aun cuando incluyen la posibilidad de
hacernos cometer errores de manera sistemática, sesgos es decir predecibles,
esas características de los ¨atajos¨ permiten domesticarlos y aprovechar su
faceta positiva.
Epílogo:
Quizás el verdadero legado
de Descartes sea la pasión por dudar. Damasio lo entendió siglos después:
pensar es un modo en que el cuerpo se siente a sí mismo. Kahneman y Tversky lo
confirmaron desde la psicología cognitiva: incluso nuestras irracionalidades
obedecen a una lógica . Cada avance de la ciencia no desmiente a Descartes: lo
continúa y lo corrige. Seguimos siendo los herederos de su método, pero también
los testigos de su error.
Tal vez
la fórmula más justa seria: “Siento, dudo y pienso —luego soy.”
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