lunes, diciembre 08, 2025

 

Epistemología: el núcleo invisible

Cuando uno “no ve” lo que está ahí

Diagrama

El contenido generado por IA puede ser incorrecto.

 

Muchos docentes, investigadores y profesionales viven dentro de la epistemología sin saberlo, como quien respira sin conocer la fisiología pulmonar. Y, sin embargo —y esto es lo que quiero reconocer  aquí— la epistemología es vital, no solo para la ciencia, sino para la vida cotidiana, para el juicio práctico, para la toma de decisiones, para no extraviarse en un mundo saturado de información y ruido.

EPISTEMOLOGIA ES LA CAJA DE HERRAMIENTAS INTELECTUALES

 

Intento hacer explícito ese núcleo que siempre estuvo presente —aunque no siempre visible—, fui integrando a Kant, Peirce, Popper, Vygotsky, Bateson, Nonaka y Takeuchi, sin desconocer que cada uno merece una profundidad mayor y que detrás de ellos hay raíces previas: Descartes, Hume y toda la tradición griega que inauguró las preguntas por el conocer.

¿Qué es la epistemología y por qué importa?

La epistemología es el estudio del conocimiento: qué cuenta como saber, cómo lo justificamos, cómo corregimos errores, cómo evitamos engañarnos, cómo distinguimos evidencia de opinión, cómo procesamos la incertidumbre. No es una disciplina lejana ni abstracta. Es el GPS cognitivo que usamos cada día, aun sin nombrarlo.

Ejemplos cotidianos

  • Cuando decidimos si una noticia es confiable.
  • Cuando elegimos un tratamiento médico frente a dos opiniones divergentes.
  • Cuando un docente evalúa si un alumno “realmente entendió”.
  • Cuando alguien interpreta un gesto, una conversación o un silencio.

Todo eso es epistemología en acción, aunque no se  la nombre.

La necesidad de explicitar

Lo epistemológico no debe darse por obvio. Los conceptos abstractos —como evidencia, inferencia, modelo, teoría, validez o sesgo— no se incorporan por ósmosis. Hay que bajarlos a la práctica, ejemplificarlos, mostrar cómo funcionan en la vida real, en la ciencia, en la medicina, en la enseñanza. El docente tiene cuatro tareas éticas: explicitar, facilitar, acompañar y animar.  Esto busca corregir precisamente eso: volver explícito lo que antes aparecía implícito. Cómo enseñar epistemología explícitamente

Un núcleo básico integrador de epistemología para pensar

Tabla

El contenido generado por IA puede ser incorrecto.

No pretendo un manual, sino un núcleo conceptual operativo, formado solo por unos autores cuya convergencia ilumina cómo pensamos, aprendemos y corregimos errores. Cada uno merece un estudio profundo, pero aquí funcionan como disparadores para un marco universitario y profesional. Y además no son los únicos.

Kant: los lentes de la mente: No conocemos las cosas tal cual son, sino a través de estructuras (espacio, tiempo, causalidad, categorías).Ejemplo médico: la noción de causa es un a priori clínico; sin ella, no habría diagnóstico posible.

Peirce: inferencia y comunidad de investigación: El conocimiento progresa por abducción, conjeturas que luego se someten a la comunidad científica. Ejemplo científico: la hipótesis de Helicobacter pylori surgió como una abducción disruptiva antes de ser verificada.

Popper: la crítica como motor: No acumulamos certezas: eliminamos errores. Ejemplo médico: cambiar un protocolo terapéutico cuando un ensayo clínico de mejor calidad refuta el anterior.

Vygotsky: el conocimiento es social: Aprendemos mediante mediación, lenguaje, signos, diálogo, zona de desarrollo próximo. Ejemplo docente: explicar “modelo científico” con objetos, metáforas, mapas conceptuales.

Bateson: los patrones que conectan: Pensar es detectar relaciones, diferencias, contextos. Ejemplo ecológico y médico: comprender una enfermedad no solo por la lesión, sino por el ecosistema biopsicosocial donde emerge.

Nonaka y Takeuchi: conocimiento tácito y explícito: El saber profesional vive en la experiencia encarnada; se vuelve útil cuando puede ser exteriorizado y compartido. Ejemplo en medicina: cómo un cirujano transmite savoir-faire a un residente.

FORMAS DE PRACTICAR

Propuesta concreta mínima:

1.      Mostrar conceptos por contraste
—Verdad vs. opinión
—Evidencia vs. anécdota
—Explicación vs. descripción
—Ruido vs. señal

2.      Practicar razonamiento abductivo-bayesiano
—Dar escenarios y pedir la mejor hipótesis explicativa.

3.      Trabajar con casos reales
—Hallazgos contradictorios
—Errores
—Enseñanza por dilemas

4.      Modelar el pensamiento
—Mostrar cómo uno mismo revisa su razonamiento.

5.      Enseñar a explicitar conocimiento tácito
—Preguntar: ¿Cómo supiste esto? ¿Qué viste que otros no vieron?

Hay más te espera

La epistemología como herramienta vital para lo cotidiano

La epistemología no es importante solo para el científico o el médico. Es vital en lo cotidiano, incluso cuando no se la ve. Todos hacemos epistemología cuando: elegimos en quién confiar, interpretamos una señal ambigua, detectamos un engaño, tomamos una decisión bajo incertidumbre, evaluamos la coherencia de un relato, priorizamos una acción, establecemos una meta y un criterio de éxito.

Aunque no usemos palabras como “criterio de verdad”, “falsabilidad” o “abducción”, el proceso subyacente es el mismo. La epistemología es invisible como los cimientos de una casa: si están bien puestos, la casa se sostiene; si no, todo se derrumba.

Conclusión: lo invisible que sostiene lo visible

Texto

El contenido generado por IA puede ser incorrecto.

La epistemología cumple la misma función que el aire, la respiración o el sistema inmune cognitivo: está siempre ahí, pero solo advertimos su ausencia cuando algo falla. Hacerla explícita no es un lujo intelectual, es una herramienta cognitiva para sobrevivir, es una forma de cuidar nuestra manera de pensar.

Y la epistemología  es, sobre todo, un modo de habitar el mundo con menos ingenuidad y más lucidez.

No hay comentarios: